miércoles, 20 de enero de 2010

Actitud

Yo lo había pensado primero.... -Fíjate que extraño resulta esto.
No quiero estar contigo por que no me complaces y tarde que temprano me vas a aburrir más ó peor que hoy. Me siento como en soneto de Sor Juana pasándole la vista nomas por leerlo.
Atrapado en una escena de un mal musical y cegado por el insomnio que me hace entre cerrar los ojos en mis actividades diarias.
A veces también con algo de esperanza, leyendo relatos y frases que encuentro sujetadas a la red, con la intención de levantarme temprano con café y cigarrillo en mano para recibir el fresco de la mañana como diría mi abuela la muerta y escuchando una rola que conocí por la Petite (eso lo acabo de descubrir). De Bosques de mi mente, si no por Petite entonces algo de Yo-Yo Ma, recargado en la pared del patio y cerquita de la ventana para ver como se disuelve el sol en todo eso. A muchas cosas de estas que no intento por pereza y una fingida depresión causada por mis vanidades y mis irresponsabilidades les llamo Oasis. Los tengo causados en mi mente y en cualquier momento del día los evoco para degustar otra realidad que no sea la de mis dientes rechinando y mis piernas temblorosas de tanto pensar.
Al rato esto se acaba, y ya así creo que tendré la oportunidad de manifestar uno de mis oasis y traerlo aquí a la verdad. Sin importar que los problemas vengan y se queden... Karma mamón.
La intención de algún bienestar físico ó emocional no me lo provoca la memoria de Roberto, ni la presencia de Armando... Aunque el sexo sea comprensivamente bueno y los orgasmos generosos no hay por mi parte ningún lazo que me uno a esos dos sueños vagos. Tampoco la amistad ni las charlas cafeteras. Los vinculos los formo yo a través de la música (aunque no sea músico), de las letras (aunque no sea escritor), de los colores y las figuras (aunque no pintor). Soy yo, mi sueño es de envidiarse, mi rostro no comparte ninguna expresión al menos que exista una chispa de magia por mínima que sea. Mis manos son la desventura de tocar amor del malo y moldear relaciones destructivas y personalidades ajenas imaginarias, pero son mis manos, también las que me te tocan el cabello y acarician mis brazos con dulzura... Egoísta mamón...
Esto de la soledad me viene bien, solo me ha venido muy bien. A diferencia de mis anteriores personalidades esta vez hay un cierto grado de felicidad alterna por estar en esta posición.
Si mañana despierto y no logro cumplir un oasis ya vendrá otro y la genialidad de construir otro y de bombardear los que ya no sirvan....
Gracias. Hasta pronto.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Diga Usted.