martes, 16 de septiembre de 2014

Nunca ninguna explicación mejor dada.

Conseguí escribir
lo mucho que me amas
aunque con ello,
mi mano
se vuelva
pájaro
para que al volar más allá
del papel y mi mesura
se vuelva razón para no odiarte
porque nunca aprendí a odiar
a nadie,
ni siquiera
a mi mismo.

La vida me ha entregado
flores para mi consuelo.

Con la tinta apareció
mi sombra
y entendí que también
ella soy yo,
que tus palabras no lograron
dispararnos en el blanco
y que las heridas de bala
me hicieron regresar aquí,
en donde ni mi sombra ni yo
tenemos que perseguirte para
que nos dispares
a quemarropa.

Nos negamos a morir
y entre tanta redención
pude reconocer a mi madre
cobijando mi dolor,
a mi padre sujetándome
mientras explicaba
la teoría sobre saber perder,
aunque no haya perdido contigo
si no conmigo mismo al cambiar
mariposas por lombrices,
al dejar de bailar para caminar
despacio y en círculos a lado tuyo,
al aferrarme a tu pecho para
irnos en caída libre a ningún futuro.

Pero es que a mi me convencían
tus abrazos,
a ti te convenían los míos,
a los dos las ganas de hacer el amor
y romper con todos los silencios para
después decretar que eramos lo que
nadie más era,
que mi carne se abría para la tuya
al igual que mis sueños para los tuyos.
Nunca ninguna explicación mejor dada.

Escribí la palabra amor dos veces
una por ti y otra por la incongruencia,
por creer que en realidad
sobreviví,
que la vida tiene nuestro mismo
cielo y que mirarlo
tiene un recordatorio
de astros y senderos
para nuestra cama
donde no hay alarma
ni un segundero
que nos obligue
a dejar de
habitarnos.

Nada,
el único recordatorio
es que no lo hay,
se agotaron los espacios
donde fechabas el día
de las flores,
la noche de quitarme
la ropa interior con la boca,
la madrugada de decirme
-No me dejes-,
la tarde de café
y los besos
fervientes.

Por una vez, al ritmo de mi mano
en el papel -Y lo juro-,
tu nombre se escribe al azar,
casi como lanzar una moneda al aire
donde siempre termino perdiendo,
pero joder,
tan bonito es tu nombre
que hasta se siente bonito perder.








No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Diga Usted.